martes, 12 de febrero de 2013

BENEDICTO XVI TAMBIEN ES "EL PAPA DE NUESTRAS VIDAS"

Hace ya algunos meses publique en el blog esta entrada con motivo de la fiesta litúrgica del Beato Juan Pablo II. En el día de hoy, cuando todavía estamos impactados por la noticia de la renuncia a la Sede de Pedro de nuestro queridísimo Santo Padre Benedicto XVI me parece que, de alguna manera recobra actualidad. Al volverlo a leer encuentro un nuevo sentido a las palabras dichas por el Papa en Cuatro Vientos en las memorables jornadas de la JMJ de Madrid y que bien pueden aplicarse al tiempo presente y a los acontecimientos históricos que estamos viviendo: …No tengáis miedo al mundo, ni al futuro, ni a vuestra debilidad. El Señor os ha otorgado vivir en este momento de la historia, para que gracias a vuestra fe siga resonando su Nombre en toda la tierra..."  No tendremos ningún miedo Santo Padre ni al mundo, ni al futuro, ni a la constatación de nuestra propia debilidad; sabemos que tenemos al Señor de nuestra parte y que usted seguirá velando por todos nosotros. Gracias, gracias, muchísimas gracias por su trabajo, por sus desvelos, por sus oraciones, por su ejemplo. Gracias por todo Santo Padre.

 

 

Orémus por Pontífice nostro Benedicto

Dóminus consérvet eum,
et viv
íficet eum,
et be
átum fáciat eum in terra,

et non tradat eum in ánimam inimicórum éius.
 

EL PAPA DE NUESTRAS VIDAS

 

Hoy 22 de octubre es un día muy especial. Es la fiesta litúrgica del Beato Juan Pablo II. Para muchos de nosotros Juan Pablo II fue en pocas palabras el  "Papa de nuestras vidas". Él nos ayudó a encontrar nuevos horizontes, nos animó en cada momento a no tener miedo y con su ejemplo a lo largo de los años nos enseño a saber vivir y a saber morir. Fui testigo de aquella primera visita del Papa a España, de la memorable tarde en el “Santiago Bernabéu” donde un Papa joven en diálogo con todos y cada uno de los jóvenes que allí nos encontrábamos nos hacía preguntas importantes; algunas las contestamos allí mismo a voz en grito, otras poco a poco las hemos ido contestando a lo largo de nuestras vidas o mejor, hemos ido encontrando la única respuesta a esas preguntas que no es otra que la fe y la confianza ciega en el Señor. También fui testigo de aquella otra visita, la última que nos hizo donde, un Papa ya anciano curiosamente nos seguía haciendo preguntas y nos dejaba el testimonio de su vida y otro lema a unir a su “Totus Tuus”. El “…Vale la pena…”, “… vale la pena seguir a Cristo…” que resonó en el aeródromo de Cuatro Vientos. Ahora, algunos años después otro Papa, Benedicto XVI, en el marco de la JMJ de Madrid nos ha dejado una especie de continuación a aquel “…vale la pena…”, cuando dirigiéndose a los jóvenes y no tan jóvenes nos decía: “…No tengáis miedo al mundo, ni al futuro, ni a vuestra debilidad. El Señor os ha otorgado vivir en este momento de la historia, para que gracias a vuestra fe siga resonando su Nombre en toda la tierra. En esta vigilia de oración, os invito a pedir a Dios que os ayude a descubrir vuestra vocación en la sociedad y en la Iglesia y a perseverar en ella con alegría y fidelidad. Vale la pena acoger en nuestro interior la llamada de Cristo y seguir con valentía y generosidad el camino que él nos proponga…”. Pensándolo bien, Benedicto XVI es también el “Papa de nuestras vidas”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario