15 DE SEPTIEMBRE. LA FIESTA DE LA VIRGEN DE LA PASION

Quiero dedicar esta entrada del blog a José Vicente Blanco Velasco, hermano de la Penitencial y buen amigo. En las fotografías de la Procesión de la Virgen de la Pasión del pasado año portador de la Cruz Alzada que iniciaba la misma, fallecido en el mes de mayo del presente año (D.e.p.)
 

El 15 de septiembre la Iglesia universal celebra la festividad de la  "Virgen de los Dolores". Ese mismo día la Cofradía de la Pasión de Valladolid celebra la fiesta de su Patrona, de nuestra Patrona, la Virgen de la Pasión. Si todas las celebraciones de la hermandad son gozosas esta la festejamos con una emoción especial porque con ella obsequiamos a nuestra Madre, pilar básico de la Penitencial, conscientes de que María es el camino seguro para llegar a Jesús. Es una fiesta vivida en la Cofradía por decirlo de alguna manera en dos actos, unidos por no se que inconsciente, que hace que en nuestro fuero interno lo uno no pueda existir sin lo otro. El primero de ellos es la celebración de la fecha marcada por el calendario litúrgico de los "Dolores de la Virgen". El segundo es..., será la procesión que el próximo día 7 de octubre saldrá por las calles de Valladolid con la imagen de la Señora a hombros de los hermanos de la Penitencial. 

Distintos momentos del transcurrir de la Procesión de la Virgen de la Pasión

En los dos días anteriores a esa procesión se habrán celebrado el triduo en su honor y su besamanos. En este día de la fiesta de La Señora, los cofrades nos presentamos delante de nuestra Madre con nuestras mejores galas y también con las mejores disposiciones interiores, porque hacemos nuestras si cabe con mayor intensidad, aquellas palabras que decimos en la oración de la Consagración de la Cofradía a tan Augusta Señora:  

"Madre Nuestra, Señora de la Pasión

Con ilimitada confianza acudimos a Vos para consagraros nuevamente nuestra Cofradía. A tu protección Oh Madre nos confiamos. En tus amorosas manos ponemos todos nuestros anhelos, todas nuestras esperanzas, todas nuestras aspiraciones y todas nuestras ilusiones. 

Te suplicamos Madre, que con maternal predilección protejas a nuestra Cofradía. Pretéjenos de todo mal a los cofrades, a nuestras familias y nuestros quehaceres cotidianos.

Reina del Cielo y del infierno espanto. Señora de nuestras plegarias. Solución de nuestra existencia. Dueña de nuestras vidas y segura valedora de nuestra muerte.

La más dulce y entrañable misericordia. La generosidad sin límite. Paladín de la libertad. El don más alto de Dios después de Cristo. Nuestra más firme esperanza.

Madre nuestra, Señora de la Pasión"

Ruega por nosotros

Con esta oración nos ponemos todos sus devotos hijos bajo su protección y cuando tenemos momentos difíciles en la Cofradía que son muchos y algún día contaremos, siempre acudimos a Ella con la confianza de que atenderá nuestras súplicas. Siempre nuestra Madre nos ha tendido la mano cuando creíamos que todo estaba perdido. Siempre ha tenido la última palabra en las muchas dificultades vividas. Siempre nos ha sacado adelante, al fin y al cabo es Nuestra Madre.
Este año en Su fiesta, en esa entrañable fiesta, hemos querido obsequiarla no solo con nuestras oraciones sino también con un presente que de alguna manera exteriorizase el amor que sentimos por Ella. La hemos regalado una diadema de plata que lucirá en su altar y que fue bendecida por el Muy Ilustre Señor Don José Andrés Cabrerizo Manchado, canónigo de la SIM Catedral de Valladolid.

Dibujo de la diadema encargada y realizada en plata de ley 

Orfebrería Triana de Sevilla

 Diversos momentos de la celebración del 15 de septiembre y bendición de la diadema de la Virgen de la Pasión

Fotografías tomadas del archivo fotográfico de la Penitencial

Respecto de la oración

© Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo

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